¿Cuántas veces hemos renunciado a hacer algo que queremos por miedo a fallar?
El miedo, es un sentimiento muy común en los seres humanos, mayormente en adolescentes, que pasamos por la etapa de querer ser aceptados por diferentes grupos sociales. Tenemos la debilidad de dudar de nuestras capacidades porque no nos sentimos lo suficientemente capaces para realizar aquello que tanto deseamos pero tememos; pasamos días y días preguntándonos ¿Qué dirá la gente de mi? ¿Y si no soy lo suficientemente bueno? ¿Y si me equivoco y la gente se da cuenta?.
Pensamos únicamente en fallar y en fallar, y
dejamos de creer en nosotros mismos, en nuestras capacidades y destrezas, en que podemos conquistar el mundo con los conocimientos y la tecnología de la actualidad. Decimos cosas como "si el lo hace entonces yo también" o "si el se atreve a hacerlo entonces yo también, si no no", y ¿por qué no ser
nosotros los que empecemos a dar ese paso?, a arriesgarnos y esperar a que todo salga bien, ¿por qué no empezamos a creer en nosotros?, puede que sea difícil y cueste trabajo alcanzar la meta, pero entre más trabajo cueste y entre mas nos esforcemos, mayor será la
satisfacción de haberlo conseguido, solo es cuestión de creer en nosotros mismos, de no tener miedo, y no tener límites.
Soñar en grande es algo que la mayoría del mundo hace y es común, pero realmente
hacer realidad esos sueños, es lo que vale la pena y lo que nos dará la mayor felicidad y satisfacción del mundo.
No hay mejor sentimiento que estar orgulloso por ser la persona en la que te has convertido, a tener remordimiento de como pudo haber sido tu vida si te hubieras arriesgado.
¿Alguna vez te has puesto a pensar por lo que esta pasando la persona que esta al lado de ti? ¿Realmente sabes cual es la razón de su comportamiento y de cada una de sus acciones?
Muchos de nosotros hemos escuchado seguramente mas de una vez la frase
"ponte en mis zapatos y me vas a entender", pero realmente no nos ponemos a pensar en el impacto que tiene esta frase y de la verdad que tiene. Estamos acostumbrados a juzgar a las personas por su físico, por la manera en que visten y hasta por la manera en la que actúan, sin tener conocimiento alguno de lo que les está pasando y cual es el motivo de su comportamiento o hasta de su manera de vestir.
Nos damos el tiempo de platicar con una persona, pero eso no significa que la conozcamos y sepamos por lo la situación que esta pasando, sea buena o mala. Somos tan
ignorantes que hacemos caso omiso a interesarnos por la vida de las personas que nos rodean, y aun así tenemos el valor de hablar de ellos como si los conociéramos perfectamente.
Si nos diéramos la tarea de interesarnos un poco más y preguntar, lograríamos darnos cuenta de muchas cosas que nunca hubieran pasado por nuestra cabeza al ver a dicha persona a simple vista, nuestra
manera de pensar acerca de ellos cambiaría, para bien o para mal, pero al menos ya lograríamos entender
el por qué de sus acciones.
Los seres humanos necesitamos apoyo, cada uno de nosotros necesita tener a alguien en quien confiar cuando estemos pasando por situaciones difíciles, o tal vez todo lo contrario, cuando tengamos que festejar algún evento o reconocimiento. Si todos pudiéramos lograr interesarnos en la vida de nuestro prójimo y realmente estar cuando nos necesita para apoyarlo incondicionalmente, seria mucho más fácil que nuestro mundo dejara de ser hogar de personas ignorantes.
